Japón estudia reabrir los reactores nucleares de la central de Oi, en la provincia de Fukui (centro) ante el temor de que se produzca en verano una falta de suministro a raíz de la crisis nuclear de Fukushima, informó hoy el diario Nikkei.
"Afrontamos severos cortes eléctricos" de no proceder a la
reapertura de los reactores de Oi, afirmó el ministro de Industria,
Yukio Edano, después de que el accidente nuclear de Fukushima haya
dejado a Japón con tan solo un reactor activo de los 54 con los que
contaba.
Según Edano, la reactivación de los reactores 3 y 4 de
Oi, los primeros del país en haber pasado las pruebas de resistencia que
teóricamente certifican que son seguros en caso de catástrofe natural,
es vital para garantizar el suministro en verano, un periodo en el que
la demanda eléctrica alcanza su tope.
Después de una reunión
mantenida ayer en la que participaron también el primer ministro,
Yoshihiko Noda, el ministro portavoz, Osamu Fujimura, y el ministro
encargado de política nuclear, Goshi Hosono, revisaron con la operadora
de Oi, Kansai Electric, la situación de los reactores y su capacidad.
Tras
la reunión, acordaron la necesidad de restablecer los reactores de Oi
al considerar que son seguros y necesarios para poder ofrecer un
suministro eléctrico estable este verano, después de corroborar que de
reactivarse aportarían hasta 2,36 millones de kilovatios extra a la
operadora, detalló el diario.
Para poder reanudar su actividad,
los reactores tienen que pasar unas pruebas de resistencia impuestas por
el Gobierno que eviten un desastre similar al de Fukushima y obtener el
visto bueno de las administraciones locales, aunque no es un requisito
legal.
En este sentido, Edano se desplazará hoy hasta la región de
Fukui para intentar convencer a las autoridades regionales de que den
su consentimiento a la reapertura de los reactores, aunque se espera que
encuentre la fuerte oposición de las provincias de Shiga y Kioto, cuyos
gobernadores ya han expresado su rechazo.
Actualmente Japón solo
tiene un reactor operativo, el número 3 de la central de Tomari (norte),
que será detenido el próximo 5 de mayo para someterlo a una revisión
regular y dejará al país, que antes de Fukushima dependía en un 30 % de
la energía atómica, sumido en el apagón nuclear. EFE
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