En los restos
no ha aparecido ningún ejemplar de 'Margaritifera auricularia' ni
'Náyades' autóctonas, por lo que se han enviado al Complejo de
Tratamiento de Residuos Urbanos para analizar la composición
ECOticias.
Un total de 11,8 toneladas de algas han sido retiradas del tramo
urbano del cauce del río Ebro, según ha informado el Ayuntamiento de
Zaragoza.
En los restos no ha aparecido ningún ejemplar de 'Margaritifera
auricularia' ni 'Náyades' autóctonas, por lo que se han enviado al
Complejo de Tratamiento de Residuos Urbanos para analizar la composición
e intentar reutilizar los deshechos en la elaboración de compost.
La retirada de las algas se ha llevado en tres tramos: en la
margen derecha, entre la pasarela del Voluntariado y el puente de la
Almozara; en la zona de Helios, y entre el puente de Piedra y el Balcón
de San Lázaro. La retirada se ha realizado en las áreas en las que se
superaban los 40 centímetros de caudal.
El consejero municipal de Medio Ambiente, Jerónimo Blasco, ha
señalado que "con esta actuación se pretende hacer un necesario
seguimiento del control de estos elementos donde su presencia sea
excesiva y conlleve problemas de salud o limpieza".
Asimismo, ha explicado que "ahora hay que hacer un seguimiento del
comportamiento de las algas tras su retirada para saber cuánto tiempo
tardan en volver a aparecer y con qué intensidad". De hecho, las tres
administraciones que han participado en la campaña --CHE, DGA y
Ayuntamiento-- están haciendo una primera valoración y análisis de esta
campaña.
En septiembre se reunirá la comisión técnica interinstitucional
para analizar los resultados de esta experiencia y su informe se
debatirá en la comisión de Participación Ciudadana de la agenda 21
Local.
Blasco ha afirmado que "esta actuación era fundamental para
ofrecer una buena imagen de la ciudad". Sin embargo, ha recordado que
"la proliferación de algas es debida a las altas temperaturas en el agua
del Ebro, alrededor de 24ºC, y a la mejora de la calidad del agua".
NO SE HA DAÑADO LA FAUNA
También, se ha felicitado por la maquinaria elegida para estos
trabajos porque "se adapta perfectamente a un tramo fluvial con zonas de
muy poca profundidad" y porque "no ha sido dañada la fauna e, incluso,
se ha conocido mejor la realidad del río en este tramo urbano, al
constatar la proliferación de especies invasoras, especialmente siluros y
cangrejos de río americanos".
De forma paralela a la extracción de los restos vegetales se ha
procedido a coger muestras de los macrófitos --plantas acuáticas
visibles a simple vista como musgos o microalgas-- y microvertebrados.
Estas tareas han comenzado con una inspección visual de las
montañas de algas acumuladas en la orilla y tras removerlas de forma
manual, con rastrillo u horca, se han introducido muestras en botes
llenos de agua que se han almacenado en cámaras frigoríficas para evitar
la degradación de las muestras.
MUESTRAS DE MACRÓFITOS Y MICROINVERTEBRADOS
Entre las comunidades de macrófitos encontradas se distinguen
siete especies: la azolla filiculoides, una especie invasora que puede
ocasionar daños ecológicos, y plantas autóctonas como potamogeton
pectinatus L., potamogeton perfoliatus L., potamogeton nodosus poiret,
potamogeton cruispus L., ceratophyllum demersum L., muriophyllum
spicatum L.
Por otro lado, de los microinvertebrados aparecidos se han
encontrado ejemplares de cangrejo rojo, una especie introducida desde
otros países y cuyos individuos no han sido devueltos al río para evitar
los daños ecológicos. También especies autóctonas como la sanguijuela y
Atyidae, un pequeño crustáceo con aspecto de quisquilla.
Además, los trabajos de retirada de algas ha permitido retirar
ejemplares de siluros de pequeño tamaño que no han sido devueltos al río
al ser una especie invasora.
REDUCCIÓN DE LA MOSCA NEGRA
Jerónimo Blasco ha asegurado que "una gran ventaja de la retirada
de algas es su impacto positivo en la reducción de las molestias que
viene produciendo la mosca negra".
En este sentido, ha anunciado que el Ayuntamiento incorporará a su
gestión ordinaria de zonas verdes la extracción de las algas
(macrófitos) en los términos que la Diputación General de Aragón y la
Confederación Hidrográfica del Ebro establezcan, y buscará su
colaboración económica.
También solicitará a ambas instituciones que esta misma labor
extractiva se realice en todo el área metropolitana porque los expertos
estiman que el perímetro de vuelo de la mosca negra es de unos 25
kilómetros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario