Así, han
remitido una carta al ministro en la que le urgen a actuar y en la que
subrayan que a principios de enero tres dictámenes de la Autoridad
Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA)
ECOticias.
Un total de 72 entidades reclaman al ministro de Agricultura,
Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, que España apoye el
próximo jueves, 14 de marzo, la propuesta de la Comisión Europea para
prohibir tres plaguicidas neonicotinoides que podrían afectar a las
abejas y otros polinizadores.
Así, han remitido una carta al ministro en la que le urgen a
actuar y en la que subrayan que a principios de enero tres dictámenes de
la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) apuntaban que el
uso de los tres insecticidas neonicotinoides más comunes (imidacloprid,
tiametoxam y clotianidina), utilizados como recubrimiento de algunos
cultivos, como el girasol, la colza, el algodón y el maíz presentan
riesgos significativos para las abejas.
Además, en la misiva señalan que en Europa, el 84 por ciento de
los cultivos y el 80 por ciento de las plantas silvestres dependen de la
polinización animal, en particular de los insectos y subrayan el
"enorme valor económico de la polinización", cifrado en unos 22.000
millones anuales de euros en Europa y unos 153.000 millones anuales de
euros a nivel mundial. Sin embargo, insisten en que su importancia
ecológica es "aún mayor". De este modo, insisten al ministro en la
polinización es "absolutamente fundamental para la conservación de la
biodiversidad".
En este contexto, estas 72 entidades señalan que en los últimos 15
años, los neonicotinoides se han convertido en los insecticidas más
utilizados y con más rápida expansión en el mundo. Su acción sistémica
(penetran en la planta a través de la savia, haciéndola tóxica a los
insectos) les convierte en peligrosos neurotóxicos, habiéndose
demostrado que afectan gravemente a las abejas y a otros insectos
beneficiosos, así como a invertebrados del suelo fundamentales para su
fertilidad.
El Imidacloprid, por ejemplo, se considera uno de los responsables
del colapso de las poblaciones de abejas y es muy tóxico para otros
insectos beneficiosos, incluyendo importantes invertebrados acuáticos y
edáficos. También tiene efectos tóxicos agudos sobre las aves.
Ante las crecientes evidencias de los daños sobre las abejas,
mariposas, escarabajos y hormigas, varios países como Alemania,
Eslovenia, Francia e Italia han a petición de la Comisión de Medio
Ambiente del Parlamento Europeo y a la vista de los recientes dictámenes
de la EFSA, la Comisión Europea ha propuesto la prohibición de tres de
los productos neonicotinoides más utilizados.
La propuesta, que se votará este jueves, ha sido acogida de manera
favorable por una mayoría de países, exceptuando el Reino Unido,
Hungría y España.
En su carta, añaden que las restricciones existentes en otros
países como Alemania, Eslovenia, Francia e Italia, han demostrado que es
posible una agricultura sin estos plaguicidas. En este contexto, ponen
de ejemplo a Italia, donde se ha demostrado que la prohibición de
neonicotinoides ha permitido una disminución importante en la mortalidad
de las abejas, sin afectar las cosechas ni la productividad del maíz5.
Al mismo tiempo, en la carta añaden que la utilización a gran
escala de estos plaguicidas conduce al desarrollo de resistencias en los
insectos plaga, generando a la larga mayores pérdidas para los
agricultores y una espiral creciente de utilización de plaguicidas cada
vez más agresivos.
En este contexto, manifiestan que la restricción de estos tres
neonicotinoides "debería ser aprovechada como una oportunidad para
empezar a actuar contra todas las causas del descenso de las poblaciones
de abejas y otros polinizadores".
Las organizaciones subrayan que, "paradójicamente" España posee la
mayor cabaña apícola y es también el principal productor de miel y
polen de la UE.
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