Mónica Lorente, exalcaldesa de Orihuela por el PP, se ha negado a
declarar ante la juez que investiga un supuesto amaño en la adjudicación
de la contrata de basuras del municipio a favor del empresario y
cabecilla de la trama Brugal, Ángel Fenoll.
A la salida del Juzgado número 3 de Orihuela, Lorente se ha ratificado
en los términos del recurso de reforma que formuló el pasado 3 de
septiembre contra su imputación en la causa.
La juez que investiga la pieza del caso Brugal relativa a la adjudicación de la contrata de basuras de Orihuela imputa a la exalcaldesa cinco delitos, entre ellos los de tráfico de influencias, fraude y prevaricación.
La defensa de Lorente esgrime, en el recurso contra su imputación,
que los informes policiales no aluden a la exalcaldesa de Orihuela como
persona destacada en la supuesta trama de corrupción. Lorente sostiene
que todas las facturas pagadas por el Ayuntamiento a las mercantiles
Colsur y Proambiente, dos de las empresas de Fenoll, fueron
cumplimentadas con el visto bueno de los técnicos municipales. Y añade
que "el tripartito [el actual Gobierno municipal de Orihuela] ha seguido
pagando a las mismas empresas". La exalcaldesa de Orihuela también
niega que haya pagado nunca trabajos a empresas vinculadas a sus
familiares.
Tras su fugaz paso por la oficina judicial, Lorente ha atendido a los
periodistas en tono sereno y ha asegurado que está dispuesta a volver
"de forma voluntaria" cuando la juez lo estime oportuno para aportar
"toda la documentación necesaria" para aclarar los argumentos de su
defensa.
Antes de la exalcaldesa ha acudido al Juzgado número 3 de Orihuela su
hermano, Jorge Lorente, a quien la juez atribuye cuatro delitos, entre
ellos los de tráfico de influencias y fraude. Al igual que su hermana,
Jorge Lorente ha rechazado declarar ante la juez y responder a las
preguntas de los representantes de las partes, entre ellos el Fiscal
Anticorrupción, Felipe Briones.
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