Los cuatro activistas de Greenpeace, entre ellos un español,
detenidos en aguas griegas después de haber obstaculizado la marcha de
un buque arrastrero cerca de las islas Cícladas, han sido liberados sin
cargos, ha informado hoy a la Agencia Efe una portavoz de esta
organización en España.Los cuatro activistas fueron detenidos el pasado jueves, según las mismas
fuentes, que han confirmado que hoy se ha celebrado una vista en la que
el juez les ha declarado no culpables de los cargos de obstrucción a la
pesca y peligro en la navegación.
La portavoz de esta organización en España ha relatado que el juez ha considerado que, aunque pararon el barco, no infringieron ninguna norma de seguridad marítima ni obstruyeron la pesca.
Según Greenpeace, los activistas -un español, dos italianos y un griego- realizaron la "acción pacífica no violenta" con el objetivo de defender la pesca artesanal, sector del que han recibido apoyo.
En concreto, pararon la pesquería del buque Alberta II por ser ésta "altamente destructiva con el medio marino".
Los activistas, que han pasado dos noches encerrados, se encuentran bien, según las mismas fuentes, que además han precisado que previsiblemente el ciudadano español regrese mañana a España.
Están asimismo contentos y satisfechos por haber podido desarrollar esta acción pacífica en defensa de los pescadores artesanales, según la misma portavoz de Greenpeace.
La ONG demanda que la reforma de la política pesquera común acabe con las pesquerías más destructivas, como la pesca de arrastre, que se reduzca la sobrecapacidad pesquera y se dé prioridad al acceso a los recursos a las pesquerías más sostenibles. EFE
La portavoz de esta organización en España ha relatado que el juez ha considerado que, aunque pararon el barco, no infringieron ninguna norma de seguridad marítima ni obstruyeron la pesca.
Según Greenpeace, los activistas -un español, dos italianos y un griego- realizaron la "acción pacífica no violenta" con el objetivo de defender la pesca artesanal, sector del que han recibido apoyo.
En concreto, pararon la pesquería del buque Alberta II por ser ésta "altamente destructiva con el medio marino".
Los activistas, que han pasado dos noches encerrados, se encuentran bien, según las mismas fuentes, que además han precisado que previsiblemente el ciudadano español regrese mañana a España.
Están asimismo contentos y satisfechos por haber podido desarrollar esta acción pacífica en defensa de los pescadores artesanales, según la misma portavoz de Greenpeace.
La ONG demanda que la reforma de la política pesquera común acabe con las pesquerías más destructivas, como la pesca de arrastre, que se reduzca la sobrecapacidad pesquera y se dé prioridad al acceso a los recursos a las pesquerías más sostenibles. EFE
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