En el mirador de la Serra Grossa de Alicante la basura campa a sus
anchas. El paraje, una atalaya privilegiada desde la que se divisa toda
la bahía, la isla de Tabarca y buena parte de la ciudad, parece
abandonada a su suerte. Latas de refrescos y cerveza, cartones de pizza,
bolsas vacías de comida rápida y botellas de cristal lanzadas desde el
mirador y diseminadas entre la maleza reinan en esta zona convertida en
parque urbano forestal tras invertir el Consell más de un millón de
euros.
La visita a la zona se completa con un carrito de la compra
abandonado, algunos periódicos de mediados de 2010 tirados en un rincón,
una de las trincheras de la Guerra Civil ocupada por un sin techo, un
reloj solar de la misma época doblado e inutilizado, o las inscripciones
realizadas por combatientes republicanos abandonadas a la erosión, por
citar lo más llamativo en una mirada rápida. Y la vegetación de pinos y
matorrales plantada en 2010 está medio seca en esta parte de la Serra
Grossa debido a fallos en el riego por goteo.
“Es una oportunidad perdida. La Serra Grossa podría ser un referente
para la vida de los alicantinos desde el punto de vista medioambiental y
también patrimonial”, defendía ayer el concejal de Esquerra Unida en el
Ayuntamiento de Alicante Rogelio González. El edil considera que el
Ayuntamiento podría emplear a parados para cuidar este enclave. “Es una
lástima que una zona tan privilegiada, con una vista única esté
abandonada”, agregó.
El Grupo Municipal Socialista ya denunció en marzo pasado el estado
de “total abandono” del parque forestal de la Serra Grossa y el olvido
que sufre el patrimonio que alberga. La portavoz socialista y el
portavoz adjunto, Elena Martín y Gabriel Moreno, elaboraron un vídeo de
denuncia en el que lamentaban la desidia del PP, al frente del gobierno
municipal. De nada parece haber servido. Este periódico intentó sin
éxito ampliar información a través del equipo de gobierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario