sábado, 4 de agosto de 2012

El incendio en el Parque Natural del Alto Tajo está “prácticamente controlado”



El incendio del Parque Natural del Alto Tajo, en la provincia de Guadalajara, está "prácticamente controlado", ha declarado el portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Leandro Esteban, quien ha pedido prudencia, aunque se ha mostrado muy optimista respecto a la completa extinción del fuego. Esta mañana, fuentes de la Consejería de Agricultura lo dieron por estabilizado y aseguraron que podría estar controlado a lo largo del día. Por ello, los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) han abandonado las labores de extinción. El incendio ha afectado a unas 1.500 hectáreas, ha informado el subdelegado del Gobierno, Juan Pablo Sánchez.
En la conferencia de prensa para dar cuenta de los acuerdos aprobados esta semana por el Consejo de Gobierno, el portavoz ha evitado proporcionar datos sobre el número de hectáreas arrasadas porque, según ha dicho, hasta que las llamas no estén completamente extinguidas "no es prudente hablar de una extensión definitiva". Eso sí, ha subrayado que el fuego ha ocasionado un daño importante en una zona con un relevante valor ecológico y medioambiental, al tiempo que ha pedido a todas las personas que transiten por el monte que extremen las medidas de precaución y de seguridad, dado el "momento climatológicamente muy complicado" por el que se está atravesando.
A las nueve menos cuarto de este mañana, se ha activado el nivel 1 de alerta, después de que la UME haya acabado con su trabajo en el control del fuego. A las 17.00 horas del miércoles, unas cinco horas después de que se originara el incendio, se decretó el nivel 2, que permite la participación de medios extraordinarios, y motivó la actuación de la UME.
A pesar de que la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, declaró la tarde de este jueves que el fuego ya estaba controlado, lo cierto es que, por el momento, y según fuentes de la Consejería de Agricultura, su estado es "estabilizado".
Las causas del incendio aún no han sido precisadas, pero Cospedal ha señalado que probablemente se originó por un descuido en la provincia de Chequilla. En la mañana de este viernes, pasadas 47 horas desde que se iniciaran las llamas, trabajan en la zona 55 personas de los medios adscritos al Plan de Prevención y Extinción de Incendios Forestales.
En las labores de extinción del incendio han participado más de 250 personas y medios terrestres y aéreos de la UME, de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, de la Comunidad de Aragón y de la Diputación de Guadalajara, entre otras Administraciones.
Las condiciones climatológicas y de viento que hubo durante la noche del miércoles ayudaron a que en la tarde del jueves se perimetrara la zona, y el fuego permaneciera en el área acotada. Se trata de un lugar de inmenso valor ecológico y una complicada orografía limítrofe con las provincias de Cuenca y Teruel, que ha vuelto a ser pasto de las llamas después de que en 2005 se quemaran 13.000 hectáreas.
Cospedal, que en la mañana del jueves visitó el puesto de mando ubicado en el paraje denominado Alto de Megina, entre las localidades de Checa y Alcoroches, ha precisado que no todas las hectáreas afectadas han ardido. La presidenta agradeció la labor de los efectivos, que "están trabajando para salvar algo que es de todos".
El fuego se originó a las 12.08 del miércoles y obligó al desalojo de más de 300 vecinos de las poblaciones de Chequilla y de Alcoroches, que fueron trasladados a Peralejos de las Truchas y a Alustante. Los evacuados pudieron regresar a sus casas a partir de la mañana del jueves. La presidenta regional se ha felicitado por que "ninguna persona se haya visto afectada".
El Parque del Alto Tajo fue declarado Parque Natural en el año 2000, y es el espacio protegido de mayor extensión de Castilla-La Mancha, y el tercer parque natural de España. Abarca una superficie total de 105.721 hectáreas, donde están incluidos 36 municipios de Guadalajara y 2 de Cuenca.
Un trágico incendio, originado en la Riba de Saelices, quemó 13.000 hectáreas del Parque Natural del Alto Tajo en 2005, y terminó con las vidas de 11 personas del retén forestal que participaban en su extinción. Un juicio, cuya sentencia ha sido dada a conocer hace tan solo tres semanas, consideró único culpable a uno de los tres excursionistas que habían sido acusados de descuidar una barbacoa.

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