El objetivo es
que si se usa un combustible de origen renovable, que no depende de los
hallazgos bajo tierra, el país puede ser más autónomo”
ECOticias.

El proyecto liderado por un grupo de profesionales en Ingeniería
Mecánica de la Universidad Tecnológica de Pereira busca elevar el
contenido de etanol en la mezcla de gasolina, el cual se obtiene de los
cultivos de caña de azúcar, producto de gran demanda en el interior del
país. La iniciativa que se denomina Hacia el E20 en Colombia, tiene como
fin mejorar la mezcla de combustible del parque automotor, que en la
actualidad está reglamentada en un 10 por ciento de etanol por 90 por
ciento de gasolina, la cual se procesa y se extrae del subsuelo.
“El objetivo es que si se usa un combustible de origen renovable, que
no depende de los hallazgos bajo tierra, el país puede ser más
autónomo”, declaró el ingeniero Sebastián Ospina Castro integrante del
proyecto, quien agregó que en, Colombia siendo un país agrícola, existe
suficiente experiencia en el cultivo de caña de azúcar, que es de donde
se extrae el etanol.
Luis Felipe Quirama Londoño, uno de los integrantes del grupo de
investigación explicó, que la iniciativa pretende dar un soporte más
sólido al programa de Biocombustibles que impartió el Ministerio de
Minas y Energía de Colombia en cuanto al uso de mezclas de carburante de
etanol y de gasolina en los automóviles del país.
“La propuesta de nuestro proyecto busca evaluar cúal es el impacto
sobre el vehículo, usando una mezcla del 20 por ciento de etanol y 80
por ciento de gasolina”, explicó Quirama Londoño para la agencia de
noticias DICYT.
Los beneficios de este proyecto –continuó Quirama– consisten en darle
al país mayor autonomía en el campo energético. El propósito es reducir
los hallazgos de pozos de petróleo y así, tener un cuidado más
responsable del medio ambiente.
El grupo de trabajo ha realizado pruebas con cuatro automóviles, cada uno con una mezcla de etanol de 20 por ciento y de gasolina de 80 por ciento. Todos tienen un acumulado de 90 mil kilómetros en las carreteras de Colombia y ninguno ha presentado complicación mecánica.
“Para aumentar la mezcla debe haber una comprobación técnica,
tecnológica e investigativa, que determine que el incremento no va
repercutir en los usuarios. Hay que valorar muy bien el impacto sobre el
rendimiento mecánico, en los materiales del vehículo y el impacto sobre
las emisiones ambientales”, destacó el ingeniero Luis Guillermo
Gaviria, quien informó que hacia el mes de junio del año en curso se
presentarán los primeros resultados de esta investigación.
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