miércoles, 11 de julio de 2012

La novela "La fábrica de árboles", ficción para rescatar el medioambiente

El escritor y fundador del partido Unión Verde, Miguel Gilaranz, ha presentado hoy su novela "La fábrica de árboles", un proyecto pionero que fusiona ensayo y novela para concienciar y divulgar información del medioambiente.


Ésta es, según el propio autor, la primera novela de ecología del siglo XXI publicada en España.
Género poco frecuente, la novela de ecología tiene como argumento principal la naturaleza, pero la de Gilaranz se incorpora al siglo XXI porque trata conceptos y problemas actuales como la huella ecológica, los vehículos eléctricos o los biocombustibles.
"Nunca se han tratado temas de medioambiente con tanta profundidad en una novela", ha asegurado a Efe el autor poco antes de la presentación del libro, cuya principal dificultad, dice, fue combinar contenido propio de ensayo y trama de novela.
"La fábrica de árboles" es el producto de dos años de trabajo, basado en "la ciencia con conciencia" o uso de conceptos científicos para concienciar al lector, ha explicado.
Además de concienciar y divulgar información acerca del medioambiente, el autor también persigue fomentar la inquietud del público y "explica sin aburrir". Ya será el lector quien decida seguir o no investigando las cuestiones planteadas, ha recalcado Gilaranz.
El proceso final de creación de la novela, se inspiró directamente en los ocho días que pasó el autor en el Parque Natural de Los Alcornocales, en el sur de Andalucía, donde descubrió "un paraíso".
La trama gira en torno a dos historias con cuarenta años de diferencia: una actual, protagonizada por Clara, una joven que desarrolla un programa para plantar árboles en los bordes de las autopistas; y Agustín Lucena, su bisabuelo, agente de la Guardia Civil.
Ha presentado la obra Joaquín Araújo, naturalista y académico de número de las Letras y las Artes de Extremadura, quien ha opinado que el que el personaje principal de la novela sea un mujer guarda directa relación con la continuidad de la vida, que, en la naturaleza, depende del género femenino.
La novela es también ecológica porque se imprimió en papel reciclado y su proceso de elaboración e impresión ha sido certificado como no perjudicial para el entorno. EFE

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