América
es el continente de las aves y así lo constata que entre Alaska y
Tierra del Fuego haya cerca de 2.500 "puntos calientes" de protección
para las 7.000 especies asociadas a la biodiversidad de su territorio y
por cuya conservación vela la recién premiada en España "Birdlife International".
La mayor alianza mundial de organizaciones conservacionistas, con presencia en 117 países, en España a través de la Sociedad Española de Ornitología (SEO), recibió
este mes de marzo el premio de la Fundación BBVA a las buenas prácticas
para la Conservación de la Biodiversidad (BIOCOM 2011), en su categoría
para Latinoamérica.
Su trabajo en la identificación de "áreas
importantes para las aves) (IBA, por su denominación en inglés), ha
localizado 2.345 puntos durante los últimos quince años a lo largo de
todo el territorio americano.
Esos "puntos calientes", subrayó la
Fundación al fallar el premio, se han convertido en referencias
esenciales para diseñar estrategias de conservación compatibles con
otros proyectos de desarrollo.
"América es el continente de las
aves, con una presencia de más de 7.000 especies de las 10.000 que se
estima que hay en todo el mundo y el conocimiento que aporta la región
marca estrategias de conservación para otros continentes", explicó a
EFEverde Amiro Pérez-Leroux, director regional de "Birdlife
International", con sede en Quito.
Según Pérez-Leroux, biólogo de
nacionalidad dominicana, "las aves son el primer paso de conservación de
un entorno. Si se protege la especie, se beneficia el bosque, el agua y
todos los recursos naturales".
Particularmente "enamorado" de los
colibríes, de los que, solo en Ecuador, hay 80 especies diferentes, el
experto considera que "la protección de la naturaleza requiere un
esfuerzo de colaboración mundial. Uno solo no puede".
Pérdida de riqueza biológica
El
objetivo de las IBA, con las que se empezó a trabajar en América en
1995, es frenar la destrucción y degradación del hábitat, la causa
principal de pérdida de biodiversidad: la riqueza biológica.
Una
vez localizados, se buscan estrategias de conservación con
administraciones locales nacionales y regionales que no siempre están
reñidos con diferentes procesos de desarrollo, indicó.
El programa
IBA en América cubre desde Tierra de Fuego, en el extremo Sur, hasta
Alaska y el Ártico de Canadá en el Norte e incluye a siete de los 17
países megadiversos de todo el mundo, aquellos en los que se concentra
la mayor parte de la biodiversidad del planeta y también las regiones
donde habita casi el 40% de las especies de aves amenazadas del planeta.
La
mayoría de las 2.345 IBA americanas identificadas hasta la fecha se
encuentran en Latinoamérica, donde hay hasta 12 países con más del 30 %
de su superficie catalogada como IBA.
El tamaño de cada IBA varía
desde menos de una hectárea, en Barbados, hasta las 7,3 millones de
hectáreas de Taboocais, en Brasil, la mayor IBA de América y de todo el
mundo.
Como referencia general, "Birdlife" señala que el 85 % de las IBA tienen entre 1.000 y 1.000.000 de hectáreas.
Antes
de determinar si una zona es IBA, "Birdlife" analiza la documentación
que aportan socios, administraciones y expertos locales que incluye,
entre otros criterios, si el área candidata es hábitat de aves
amenazadas, si es punto de reunión de aves con una distribución
restringida o si congrega a una avifauna importante a escala global.
Hasta
la fecha, hay cerca de 11.000 IBA en todo el mundo en 200 países y
territorios gestionados por "Birdlife" y sus socios. EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario