La Unión Europea destinará 365 millones de euros en
2013 para hacer sus ciudades más "inteligentes", uniendo la
investigación en energía, transporte y comunicaciones para abordar
problemas como la congestión y los desechos energéticos.
Particularmente en tiempos de estrecheces económicas,
la Comisión Europea se ve capaz de alentar medidas y asumir riesgos para
reducir las emisiones de dióxido de carbono y para crear modos
eficientes de ahorrar costes en un momento en el que las empresas más
pequeñas son más propensas a evitar riesgos.
"Tenemos que impulsar la investigación y la innovación
que nos puede llevar a nuestros objetivos de ciudades libres de dióxido
de carbono, acabando progresivamente con los coches de combustibles
convencionales en el centro de las ciudades, optando por vehículos
eléctricos y autobuses silenciosos que no arrojen humo", dijo el
comisario de Transporte de la UE, Siim Kallas.
El propósito es maximizar la eficacia de los recursos
de investigación y concentrarlos en un pequeño número de proyectos de
demostración.
"La innovación impulsa la competitividad de Europa y es
el mejor medio de abordar la eficiencia energética", dijo el comisario
de Energía, Günther Oettinger.
Añadió que la alianza para lograr ciudades y
comunidades inteligentes podría ayudar a difundir tecnología como
sistemas de calefacción y aire acondicionado, medidores inteligentes y
edificios de energía cero.
Un grupo que incluye a jefes empresariales,
responsables municipales y autoridades regulatorias se creará para
ayudar a poner en marcha el proyecto, dijo la Comisión, y se emitirán
licitaciones para seleccionar programas que puedan optar a las
subvenciones de la UE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario