domingo, 7 de octubre de 2012

Entre el rechazo de Europa y el avance en Sudamérica


Los cantones suizos rechazaron unánimemente cualquier avance de los transgénicos para cultivar en el país y declararon a Suiza, área libre de cultivos manipulados genéticamente, según informa Greenpeace.
La decisión se suma a la serie de países que descartaron de plano el uso (Grecia, Hungría, Francia), desde que Austria se convirtiera en pionera en la materia al prohibir estas plantaciones ya en el año 1999.
En Suiza, distintas iniciativas populares habian logrado que el gobierno decretara un cierre parcial a los transgénicos en 2005: ahora los legisladores presionados por la población han aceptado a nivel del Consejo Nacional, firmar una moratoria para comenzar a utilizar semillas transgénicas que se extenderá hasta 2017 en principio.
La prohibición alcanza al maíz MON810, la variedad más difundida en Europa, ahora en retroceso.
Países como Luxxemburgo, Alemania, Bulgaria y Polonia, se encuentra actualmente redactando nuevas normas para prohibir el maíz transgénico que de hecho no está siendo cultivado.
Algo similar ocurre en Italia y en Portugal, donde la limitación se practica por regiones, e incluso por municipios como el de Madeira, en Portugal, la primera región reconocida por la Comisión Europea como “libre de transgénicos”.

Mientras tanto en Sudamérica…
Paraguay ratificó que en acuerdo con la multinacional Monsanto (la misma que está en retroceso en Europa) producirán las primeras semillas transgénicas latinoamericanas, que serán destinadas al cultivo propio y exportadas.
El Instituto Paraguayo de Tecnología Agropecuaria, recibirá la tecnología de la multinacional norteamericana, confirmó el Ministro de Agricultura y Ganadería guaraní. “Paraguay va a producir su propia semilla transgénica que va a estar a disposición de todos los productores”, anunció.
Las empresas Cargill, Río Tinto, y Syngenta, todas vinculadas a Monsanto, se están desarrollando intensamente en Paraguay desde que fuera derrocado Fernando Lugo, que había limitado el avance de los transgénicos en el país y prohibido la semilla de algodón transgénico Bollgard BT, de Monsanto.
En la región, los países del Mercosur, más Bolivia, son actualmente los mayores productores de maíz transgénico en el mundo.

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