lunes, 9 de diciembre de 2013

'La sociedad no es consciente de la gravedad de lo que está pasando en la energía'

Energea se organiza en diferentes áreas de trabajo: la gestión energética, la consultoría energética (industrial y edificatoria) y la automatización y monitorización de procesos.
ECOticias.
¿Cuándo se creó la empresa y cuál ha sido su evolución?
Fue en junio de 2010 y la evolución desde aquel momento la podríamos definir como positiva, en el sentido de que hemos ido creciendo poco a poco pero cada vez con proyectos más interesantes y de mayor envergadura .

¿Cuál sería, con un ejemplo, su modelo de negocio?
Energea se organiza en diferentes áreas de trabajo: la gestión energética, la consultoría energética (industrial y edificatoria) y la automatización y monitorización de procesos.
Por ejemplo la consultoría industrial es uno de los puntos claves de mejora de la competitividad de las empresas. Consiste en realizar una gestión integral a nivel energético orientada a reducir los costes energéticos de producción. En este sentido realizamos un acompañamiento flexible y adaptado a la realidad de nuestros clientes.
Entre sus servicios cabe mencionar la auditoría, la consultoría y la gestión energéticas. ¿Cuáles son las diferencias entre estos servicios?
La consultoría es un concepto más amplio donde se incorporan desde las prescripciones a la hora de concebir un edificio o instalación, hasta acciones concretas correctivas derivadas de un mal funcionamiento.
La auditoría es un producto de la consultoría. Es un diagnóstico sobre un centro consumidor de energía ya sea un edificio de viviendas, terciario o una industria, para identificar cuáles son aquellas mejoras que permitirían reducir la factura energética del cliente. A partir del diagnóstico inicial proponemos una serie de acciones para alcanzar este objetivo con una evaluación del retorno que tendría llevar a cabo cada acción.
En cuanto a la gestión energética, tiene como finalidad incidir en la explotación de un edificio o proceso industrial y se puede hacer de diferentes maneras. Una de ellas es mediante la introducción del gestor energético, que permite ir adaptando el funcionamiento del sistema a las necesidades controlando en todo momento la facturación y otros factores externos. Nosotros por ejemplo estamos gestionando ahora 18 edificios -16 de los cuales son de viviendas.
Otra forma de gestión energética es la implantación de sistemas de monitorización que permiten automatizar el funcionamiento de las instalaciones y obtener el ahorro por esta vía.
¿Un particular que quiera ahorrar en su factura también puede solicitar sus servicios?
Sí puede hacerlo pero seguramente los gastos asociados a la consultoría tengan un retorno elevado, es decir, los ahorros obtenidos traducidos en términos monetarios no permiten amortizar los costes. En casos de comunidades de vecinos con sistemas centralizados está más justificado.
¿Cuáles son los vectores principales que inciden en la eficiencia energética?
Principalmente: el diseño de los sistemas, el funcionamiento y el tipo de tecnología. Una buena concepción o diseño hace que se optimicen los consumos. Los aspectos funcionales, es decir, parar las máquinas y/o regular adecuadamente. Para estos aspectos son de mucha ayuda los sistemas de monitorización que nos dan la información de cómo está funcionando y consumiendo lo que estamos evaluando ya partir de ahí tomar medidas. La automatización nos permitirá fijar consignas que optimizarán el funcionamiento. En este sentido, cabe destacar comparativas de tendencia que nos permiten conocer cuando el consumo se sitúa por encima de lo que debería estar.
Antes comentaba que la empresa trabaja con industrias. ¿Por alguna razón en especial?
Es una línea de negocio que está funcionando bien, y de hecho hay un importante potencial de ahorro en este sector.
¿Qué importancia tiene para su negocio la administración local?
También hemos trabajado con ayuntamientos directamente o a través de la Diputación de Barcelona. Actualmente el sistema público es una pequeña parte de nuestro negocio pero evidentemente también hay mucho potencial de ahorro en este sector y en el futuro podríamos trabajar más, sobre todo pensando en cuando haya cambios en la situación económica y de funcionamiento de la administración, en el sentido de que la administración local pueda adquirir nuevas competencias en este ámbito.
¿Cómo está afectando la crisis económica el ámbito de la eficiencia energética? ¿Y en particular en su empresa?
En los últimos tiempos, a nivel industrial, las empresas han ido pasando de no tener cultura de eficiencia energética a ir adquiriendola y la crisis ha actuado como un estímulo. Pero, por otra parte, las últimas regulaciones del estado en este terreno han hecho de contrapunto a esta tendencia. En concreto, dentro de la facturación energética de las empresas ha aumentado la parte de potencia, que es fija, y se ha reducido el peso de la parte de consumo de energía. Este esquema nos acerca hacia un concepto de "tarifa plana" y esto hace que el ahorro energético sea menos atractivo porque no es tan rentable económicamente como antes.
En todo caso puede ser atractivo aún para grandes empresas que consumen muchos kilowatios, pero no para el resto. En definitiva que el gobierno central más que ayudarnos nos pone obstáculos.
¿Hasta qué punto la implantación del Código Técnico de la Edificación está ayudando a estimular su sector?
Sí ha ayudado pero la cuestión es que se aplica a nueva edificación y, desgraciadamente, cuando se aprobó el Código ya había mucha construcción hecha. Pero evidentemente sí se puede afirmar que ha contribuido a extender la conciencia sobre la eficiencia.
¿La rehabilitación a fondo del parque inmobiliario es una gran asignatura pendiente de este país?
Totalmente. El hecho de que la inmensa mayoría del parque sea anterior al Código Técnico de la edificación hace que un gran número de edificios presenten deficiencias en los aislamientos y otros elementos que hacen que tengan poca calidad desde el punto de vista energético, pero al mismo tiempo tienen un enorme potencial de ahorro en el que se podría trabajar mucho. Actualmente hay diferentes proyectos con fondos europeos que están orientados precisamente a estudiar cuáles serían las posibles líneas de negocio para actuar en estas viviendas haciendo que las inversiones tengan un retorno. Todo esto viene de la marcada diferencia que hay entre un edificio que ha sido concebido de manera eficiente y uno al que se le han de poner "parches". El primero tendrá un comportamiento óptimo durante toda su vida útil, aunque deberá intervenir en diversos momentos. En cambio, el coste de intervenir en el segundo será siempre mucho más elevado. Sin embargo las administraciones están trabajando en la buena línea para intentar que estos costes sean más asumibles, lo que nos permitirá avanzar en la mejora de todo el parque.
Este año se ha publicado el Real Decreto 235/2013, de 5 de abril, por el que se aprueba el procedimiento básico para la certificación energética de los edificios de nueva construcción. ¿Cómo valora este instrumento normativo?
Este Real Decreto ayuda de una manera sencilla, como es un sistema de etiquetado, a tomar conciencia de cuán eficiente es un edificio y a hacer que este dato sea un criterio más de decisión a la hora de comprar una vivienda.
¿Necesitamos nuevas normas para impulsar el sector?
No creo que hagan falta más normas sino que las que están aprobadas sean diferentes. Me refiero a las regulaciones que comentaba anteriormente que nos acercan a la "tarifa plana" y que hacen menos interesante económicamente la necesidad de ser más eficientes. Pienso que las normas actuales deberían haber ido en la línea de la eficiencia energética, no es, por tanto, una cuestión de cantidad sino de calidad.
Además los borradores de las nuevas leyes, reales decretos y órdenes ministeriales que últimamente ha aprobado el gobierno central, han sido concebidas bajo el máximo secretismo y sin ningún tipo de diálogo con el sector.
¿Cuesta aún ver la relación entre eficiencia energética y competitividad en los sectores productivos, por parte de los gestores de las empresas? ¿O en estos momentos ya está muy asumida?
Yo pienso que en estos momentos la mayoría de industrias de nuestro país ya lo ven muy claro. Lo que pasa es que se trata de una cultura muy reciente y diría que le queda mucho camino por recorrer.
Aunque el gobierno español tiene un plan de energías renovables vigente hasta 2020, este sector no parece pasar por su mejor momento para las mismas decisiones del gobierno. ¿Cómo está afectando la situación de freno a las renovables a la eficiencia energética?
Aquí tenemos un problema y es que las políticas energéticas llevadas a cabo por los diversos gobiernos en Madrid no generan confianza. Para que un sector funcione, siga adelante y atraiga nuevos inversores, la confianza es básica. No creo que logremos los objetivos establecidos para 2020 de la UE: las nuevas plantas de renovables se han quedado sin incentivos y además se han creado barreras artificiales para el autoconsumo, es decir, las energías renovables y la cogeneración han sido expulsadas por el sector. Esto ha hecho que las empresas que tradicionalmente se habían dedicado a las renovables actualmente estén o bien derivando hacia otros ámbitos o cerrando. Ahora mismo el sector de las renovables está tocado y es una lástima que no haya podido aprovechar todo este conocimiento e I + D que se ha generado en este ámbito y que beneficiaba todo el sector energético. Estamos asistiendo a una descapitalización y lo que también es triste es que la sociedad no sea consciente de la gravedad de lo que está pasando.

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