Analysing
REDD+:Challenges and Choices (Análisis de REDD: Retos y alternativas),
publicado en el marco de la cumbre Río+20, examina como el esquema
respaldado porla ONU
ECOticias
REDD+ es un éxito como idea –pero su implementación está llena
de desafíos, de acuerdo a una nueva publicación del Centro para la
Investigación Forestal Internacional(CIFOR).
Analysing REDD+:Challenges and Choices (Análisis de REDD: Retos y
alternativas), publicado en el marco de la cumbre Río+20, examina como
el esquema respaldado porla ONU–que intenta reducir las emisiones de
carbono a través de evitar la deforestación– está siendo implementado y
presenta ideas sobre cómo mejorarlo.
“Es una revisión de la realidad sobre lo que está sucediendo en el
terreno”, dice Arild Angelsen, economista ambiental de CIFOR y profesor
enla Universidad Noruegade Ciencias de la Vida y principal editor del
libro.
El libro basado en la investigación esboza un proyecto amplio de investigación comparativa sobre REDD+, el Estudio Comparativo Global, que está siendo dirigido por CIFOR y sus socios en Asia, Africa y Latinoamérica.
Siete años después de que se lanzó la idea de reducir emisiones a
través de deforestación evitada, la publicación hace una mirada crítica
de REDD+, preguntando cómo ha cambiado, cómo se está llevando a cabo en
escenarios específicos de políticas nacionales –y destacando las
opciones para hacer a REDD+ más efectivo, eficiente y equitativo.
“REDD+ como idea es una historia de éxito”, dijo Angelsen”.Fue algo
genuinamente nuevo, y el nuevo elemento clave fue que se basada en pagos
por desempeño o resultados. También venía acompañado de gran cantidad
de dinero”.
“Lo comparamos con ´desarrollo sostenible´–una frase atractiva y que
promete hacer mucho. Ambas ideas han servido de inspiración para los
formuladores de políticas y los profesionales, pero los resultados hasta
el momento no son lo que muchos esperaban”. Pero a medida que REDD+ ha
pasado de ser una idea al mundo real, los desafíos se han multiplicado.
Dichos desafíos son prácticos y políticos –desde cómo medir y
monitorear las emisiones de carbono evitadas dejando los bosques en pie,
hasta decidir quién debería recibir el dinero generado por REDD+, a
lograr coordinación entre los niveles de gobierno local, regional,
nacional e internacional.
“El diseño e implementación de REDD+ es sumamente desafiante”, dijo Angelsen.
“Lo más difícil está en el detalle –cuando uno empieza a trabajar los temas específicos de REDD+ ahí encuentra más conflicto”.
“Si uno tiene un sistema de pagos, en teoría podría hacer que todos
ganen –pero en la práctica hay dos desafíos: en primer lugar, no
contamos con financiamiento suficiente para cambiar la ecuación
fundamental y por lo tanto hacer que todos sean ganadores, y en segundo
lugar, es muy difícil diseñar un sistema que se asegure de que todos
ganen”.
“Hay muchos desafíos prácticos, pero este libro muestra que se pueden
superar, que hay soluciones técnicas, por lo que los principales
problemas son de orden político”, dijo Angelsen.
Analysing REDD+ sostiene que para lograr totalmente su potencial como
herramienta para mitigar el cambio climático, REDD+ requiere un cambio
transformador en la forma en que concebimos a los bosques. Pero Angelsen
dijo, también puede ayudar a impulsar este cambio.
“Hasta ahora, en las instituciones y en el marco de trabajo de
políticas, los incentivos estimulan la tala de árboles en vez de
protegerlos”, dijo.
“Por lo que necesitamos cambiar esto, para destacar el valor de los
árboles vivos, el valor de los servicios proporcionados por los bosques
en pie, y dejar que eso se refleje en las instituciones y en el marco
regulador y en el gobierno – y eso requiere un compromiso político y
coaliciones para el cambio”.
“Es un cambio en el marco de gobernanza económica para los bosques, a uno que valore los bosques vivos”.
Arild Angelsen dice que hay mucha incertidumbre acerca de REDD+ –pero esto no debería llevar a la inacción.
“Para mí el punto de arranque es que el cambio climático es real”, dijo.
“Hay un alto riesgo de cambio climático dañino, y deberíamos hacer
algo al respecto, y REDD+ es una parte clave de lo que deberíamos
hacer”.
“No es simple, pero aun así, REDD+ es más fácil y menos costoso que
otros muchos esfuerzos de mitigación. Por lo que pienso que todavía hay
motivos para estar entusiasmados cuando se trata de REDD+, todavía es
importante”.
“No se puede abordar el cambio climático sin incluir a REDD+”.
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