martes, 8 de octubre de 2013

Desarrollan pilas de hidrógeno más baratas

Una pequeña empresa británica espera con ilusión el día en el que llevemos nuestros autos a la gasolinera para abastecerlos de hidrógeno.
Acal Energy, con sede en Runcorn en Cheshire, dice que, ha desarrollado un proceso que podría hacer que las pilas de combustible de hidrógeno sean mucho más baratas y duren más que las que producen las tecnologías actuales.
La compañía quiere otorgar licencias a los fabricantes de automóviles del mundo, abriendo así el camino para que los vehículos de hidrógeno se vendan a gran escala en 10 o 20 años.
"Creemos que esta es una de las tecnologías de vanguardia", dice Brendan Bilton, director comercial de la compañía .
"Estamos bastante confiados y entusiasmados de que esto va a empezar a abrir barreras", continúa , "permitiendo que las pilas o células de combustible se incorporen en productos para aplicaciones de gran consumo ".
Es un sueño audaz, pero no es una locura.


Persuadir a los clientes
La industria del automóvil está ya muy avanzada, con planes de una primera generación de coches de hidrógeno.
Hyundai, el fabricante de Corea del Sur, anunció que pronto comenzará a vender una versión con motor de hidrógeno de su modelo ix35 .
Mientras tanto, se espera que el gigante japonés, Toyota, presente su primera incursión en este campo en el próximo Salón del Automóvil de Tokio del mes que viene.
Se cree que otros nombres importantes, incluyendo Daimler y Volkswagen, están en vías para introducir vehículos de hidrógeno en salas de exhibición en 2017.
Pero pocos esperan que estos autos de hidrógeno de primera generación se vendan en grandes cantidades.
Acal Energy está lanzando su tecnología como una manera de lograr una segunda generación de vehículos menos costosos y más duraderos que podrían, si todo va según lo previsto, constituir a partir de 2020 un gran desafío a la larga dominación del motor de combustión interna.
Para empezar, puede que lleve un poco de tiempo persuadir a los consumidores.
El hidrógeno es ampliamente considerado como un combustible peligroso. Una imagen respaldada por una grabación difundida por noticieros del dirigible Hindenburg estallando en llamas en la década de 1930.
Pero en realidad, los expertos no parecen intimidados por este desafío particular.

"Más barato que el platino"
Señalan que el hidrógeno ya es utilizado y administrado de forma rutinaria en procesos industriales.
La principal razón de que se considere el hidrógeno como combustible para el futuro es porque está libre de emisiones desde que se empieza a utilizar.
El hidrógeno se combina con el oxígeno para formar una especie de celda de combustible. Este proceso genera electricidad para hacer funcionar el motor en el vehículo .
Los productos de desecho son calor y agua inofensiva.
El agua es benigna, a diferencia de las emisiones mundiales de dióxido de carbono que arrojan hasta los vehículos de gasolina y diesel más eficientes.
Durante muchos años, la industria del automóvil ha estado desarrollando células de combustible que utilizan platino costoso como catalizador para la generación de energía a partir de hidrógeno.
Acal Energy afirma que el problema con esta tecnología es que da como resultado células de combustible que son prohibitivamente caras debido al alto contenido de platino, o son propensas a degradarse rápidamente.
Para superar estos problemas, la empresa ha desarrollado lo que Bilton describe como un "catalizador líquido", compuesto por "una solución de sales de metales disueltos".
Además de ser mucho más barato que un catalizador de platino, el líquido actua como un refrigerante y un agente de limpieza que extiende la vida de la pila de combustible mediante la eliminación de los subproductos perjudiciales a medida que circula a través de un "regenerador".
"Tenemos una solución que por un lado aumenta la durabilidad y por otro reduce el costo", dice el Bilton .

Un laboratorio de química gigante
La compañía tiene sus oficinas en un parque científico que hasta hace pocos años era el centro de investigación y desarrollo de los productos químicos del gigante británico ICI, ahora reducido en tamaño y de propiedad extranjera.
Curiosamente, las ideas detrás de la tecnología patentada FlowCath de Acal Energy se derivan de las técnicas desarrolladas para lavar la ropa de manera más eficiente .
El fundador de la compañía, Andrew Creeth, ahora director de tecnología, pasó gran parte de su carrera trabajando como científico para el fabricante de detergentes Unilever.
El desarrollo del producto se lleva a cabo en un ambiente no muy diferente de un laboratorio gigantesco de una escuela de química, lleno de productos químicos que burbujean, equipos complicados e investigadores astutos en batas blancas.
La compañía ya ha recaudado US$24 millones de dólares para financiar su trabajo en una mezcla de inversores privados y fuentes gubernamentales.
Actualmente espera recaudar otra cantidad similar en una nueva ronda de financiación.
Con el tiempo, Acal Energy tiene como objetivo obtener beneficios del modelo de negocio iniciado por el diseñador británico de microchips, Arm Holdings.
La tecnología de Arm está integrada en la mayoría de los chips utilizados en los teléfonos inteligentes del mundo y en las tabletas.
La empresa recibe un pequeño pago de regalías cada vez que alguien actualiza su dispositivo móvil.
Acal Energy sueña con un éxito similar emitiendo licencias de su tecnología a los fabricantes de automóviles en las próximas décadas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario