Greenpeace ha presentado hoy sus alegaciones a la revocación parcial de la orden de cierre de Garoña (Burgos) y ha denunciado que Endesa e Iberdrola ingresarán más de 1.100 millones de euros con la prórroga de la planta nuclear.
Según la responsable de la campaña Nuclear de Greenpeace,
Raquel Montón, esta orden de reapertura de Garoña "enriquecerá a los
propietarios, sin contraprestación alguna, ya que se embolsarán más de
1.100 millones de euros durante los seis años de ampliación de su
explotación".
Greenpeace estima, tras estudiar el proyecto de
revocación parcial de la orden de Industria -emitida por el anterior
ministro Miguel Sebastián y que preveía su clausura en 2013- que hay
diez razones para no reabrir Garoña.
En primer lugar, dice que no
mejora la dependencia energética; no repercute en la seguridad de
suministro, "en estos momentos existe sobrecapacidad de generación y
Garoña supone menos del 1,2 % en el sistema eléctrico español", y no
ayuda a compensar el déficit tarifario, ya que "la fijación del precio
de generación de la electricidad es el derivado de una subasta en el
sistema de mercado y, por lo tanto, recibe la misma retribución que
otras tecnologías".
Cementerio nuclear
Greenpeace
argumenta, además, que tampoco "está condicionado por la existencia o
no de un cementerio nuclear", y "no tiene en cuenta la limitación que el
Consejo de Seguridad Nuclear establece sobre el tiempo de
almacenamiento del combustible gastado en las piscinas de las
nucleares".
El comunicado añade que la prórroga de Garoña tiene
"un efecto negativo sobre la actividad económica porque el
desmantelamiento aumentaría los empleos directos. A lo que hay que
añadir la reactivación de la economía para la cual existen ayudas
estatales".
En su opinión, también se vulnera "el principio de
seguridad jurídica contenido en el artículo 9.3 de la Constitución
Española porque todas las consideraciones que se realizan ya habían sido
valoradas para la determinación de la fecha de cierre en 2013".
Y "se lesiona directamente el interés público y de defensa de una política energética y medioambiental determinada".
Greenpeace
pone a disposición de la ciudadanía el proyecto de revocación, las
alegaciones que ha presentado y facilita a través de su web la
posibilidad de participación pública a los interesados que quieran
dirigir sus comentarios a Industria. EFEverde
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