De hecho, y
según las conclusiones de un trabajo que publica en su último número el
'British Medical Journal' (BMJ), subiendo un 20 por ciento el impuesto
ECOticias.
Investigadores de la Universidad de Oxford y la City University
de Londres, en Reino Unido, aseguran que los impuestos alimenticios que
benefician a los productos más saludables, como frutas y verduras, y
penalizan a la comida rica en grasas y a las bebidas azucaradas son
eficaces para mejorar la salud de la población mundial.
De hecho, y según las conclusiones de un trabajo que publica en su
último número el 'British Medical Journal' (BMJ), subiendo un 20 por
ciento el impuesto a estos últimos alimentos podría servir para reducir
la prevalencia mundial de una amplia variedad de enfermedades, como las
cardiovasculares y cerebrovasculares.
El informe de los doctores Oliver Mytton y Mike Rayner, del
Departamento de Salud Pública de la Universidad de Oxford, y Corinna
Hawkes del Centro de Política Alimenticia de la City University, va a
ser presentado durante la 65 Asamblea Mundial de la Salud que se
celebrará en Ginebra (Suiza) la próxima semana.
Actualmente, ya hay varios países que han implementado una serie
de impuestos a los alimentos considerados insanos, caso de Dinamarca,
que introdujo recientemente un "impuesto a las grasas"; Hungría, que
cuenta con un "impuesto para la comida basura"; o Francia, que lo aplica
a las bebidas azucaradas.
Del mismo modo, en América Perú ya ha anunciado su intención de
gravar la comida basura, mientras que otros países, como Irlanda o
Estados Unidos, también planean alguna medida al respecto.
Sin embargo, estos expertos consideran que ante la actual epidemia
de obesidad --que afecta ya a 500 millones de ciudadanos en todo el
mundo-- y sus enfermedades asociadas, será necesario establecer medidas
urgentes para paliar este problema.
Como apoyo a esta propuesta de subida de impuestos, Mytton y su
equipo analizaron si esta medida había surtido efecto en aquellos países
donde ya estaba implantada y realmente se podía mejorar la salud de la
población.
UN 20% PARA QUE SEA EFECTIVO EL GRAVAMEN
Los investigadores revisaron los estudios publicados sobre el
efecto de los impuestos a los alimentos y observaron que la efectividad
sólo es posible si la subida es de al menos un 20 por ciento.
"La efectividad surge de tres fuentes: experimentos naturales,
ensayos controlados sobre el cambio en los precios de los productos y
modelos científicos", ha explicado este experto en declaraciones a la
BBC, recogidas por Europa Press.
Así, como ejemplo aseguran que si se impusiera un gravamen de 20
por ciento en las bebidas azucaradas en Estados Unidos se reducirían 3,5
por ciento las tasas de obesidad en el país. Y el mismo impuesto en los
alimentos insanos en el Reino Unido podría evitar 2.700 muertes cada
año por enfermedades del corazón, según los investigadores.
El incremento en el precio de estos productos, como han
reconocido, sería efectivo a la hora de reducir las ventas y,
consecuentemente, su consumo.
No obstante, "es necesario hacer consciente a la población de la
importancia de consumir otros alimentos nutritivos --como frutas y
verduras-- e incrementar el gasto de energía con una mayor actividad
física", ha apuntado Mytton.
No hay comentarios:
Publicar un comentario